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El cambio climático está dejando su huella en el sector azucarero de Veracruz, hasta la previsión de un panorama desafiante para la zafra 2023-2024. El dirigente de la organización cañera del Ingenio Central Potrero, Ángel Gómez Tapia, reveló que las condiciones meteorológicas adversas han afectado el proceso de maduración de la caña, impactando negativamente la cosecha, y que la tendencia podría agravarse en el futuro.

El año pasado, la región experimentó una intensa sequía, seguida de lluvias en octubre que mejoraron la cosecha. Sin embargo, las precipitaciones abundantes en diciembre y enero impidieron la adecuada maduración de la caña, generando preocupación para el sector. 

Gómez Tapia destacó la falta de apoyo, el deficiente control de plagas como la mosca pinta y el gusano barrendador, así como la escasez de tecnología de riego en el campo cañero como algunos de los obstáculos inmediatos más grandes.

Con más de 500 mil toneladas de azúcar menos en comparación con la misma época del año pasado, y cerca de 360 mil toneladas menos en relación con las fechas actuales de la temporada pasada, la industria azucarera de Veracruz enfrenta una seria alerta.

 El impacto del cambio climático se manifiesta en pérdidas significativas que amenazan la producción y la estabilidad económica de la región, planteando desafíos considerables para el futuro inmediato del sector.

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