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En una decisión que ha sido calificada como histórica, los delegados reunidos en la COP28 acordaron emprender una "transición para alejarse" de los combustibles fósiles, marcando una victoria para los esfuerzos globales en torno a la crisis climática. El presidente de la COP28, Sultan al-Jaber, certificó la aprobación del documento clave, describiéndolo como un "paquete histórico para acelerar la acción climática".

El secretario de Naciones Unidas para el Clima, Simon Stiell, enfatizó la necesidad de poner fin al uso de los combustibles fósiles, señalando que este acuerdo representa el principio del fin de una era marcada por la quema de carbón, petróleo y gas natural. 

El pacto, que insta a triplicar el uso de energías renovables y duplicar la eficiencia energética, también establece la necesidad de abandonar los combustibles fósiles en los sistemas energéticos de manera justa y equitativa. Aunque algunos críticos expresaron preocupaciones sobre las lagunas en el texto, el presidente Al-Jaber actuó con rapidez para certificar el acuerdo sin abrir el turno de palabra.

Anne Rasmussen, delegada principal de Samoa, expresó la insatisfacción de las pequeñas naciones insulares por no haber participado en el anuncio del cierre del pacto. Bolivia, por su parte, calificó el acuerdo como una nueva forma de colonialismo. Sin embargo, el enviado especial de Estados Unidos, John Kerry, elogió el espíritu de cooperación que prevaleció en la negociación.

Aunque el acuerdo no menciona específicamente la "eliminación progresiva" de los combustibles fósiles, aboga por una transición ordenada y justa, acelerando las acciones en esta década crítica. El documento también contempla que el mundo alcance la neutralidad de emisiones en 2050 y establece un punto máximo de contaminación por carbono en 2025, con flexibilidad para naciones específicas.

La intensa negociación, que se prolongó hasta altas horas de la madrugada, resultó en la tercera versión del documento central presentado en dos semanas. A pesar de las mencionadas lagunas, la inclusión explícita de la mención a los "combustibles fósiles" fue destacada como una victoria general en la lucha contra el cambio climático.

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