La temporada de pesca durante este verano ha resultado desalentadora para los trabajadores del mar en Veracruz, según Bernardo Hernández Guzmán, presidente de la Federación de Pescadores de Veracruz. Hernández Guzmán reportó que la falta de una buena cosecha ha tenido un impacto negativo en la economía de los pescadores locales.

El líder de la federación indicó que las capturas han sido inferiores a las esperadas debido a los elevados niveles de sedimento en los ríos, lo cual ha alterado la calidad del agua y, por ende, la disponibilidad de peces. “El saldo de la temporada es negativo. No vimos la pesca que esperábamos porque los ríos traen mucho sedimento y el agua se resuelve”, comentó Hernández Guzmán.

En cuanto a los precios, Hernández Guzmán destacó que el mercado ha experimentado una desaceleración en la demanda. Los precios del peto, por ejemplo, oscilaron entre 75 y 150 pesos, dependiendo del vendedor. A pesar de que los precios parecen accesibles, la falta de demanda ha impedido que se produzca un incremento significativo en los ingresos de los pescadores.

El presidente de la Federación atribuye la baja en las ventas en parte a que muchos hogares están destinando su dinero para los gastos relacionados con el regreso a clases. Esta situación ha reducido el poder adquisitivo de las familias y, en consecuencia, la demanda de productos pesqueros.

Hernández Guzmán espera que el otoño traiga condiciones más favorables para la pesca y una recuperación parcial en la economía del sector. Mientras tanto, los pescadores continúan enfrentando desafíos significativos en su labor diaria.